domingo, 1 de marzo de 2009

El narco arrasa con el Estado, dice Muñoz Ledo


Se debe crear un sistema de destitución presidencial, dice el coordinador del FAP.

Claudia Guadarrama

El año 2010 es la próxima parada, dijo Porfirio Muñoz Ledo. El 2010 es la ruptura que viene y es el momento para que las cosas cambien.

En el contexto de la Feria del Libro del Palacio de Minería, Muñoz Ledo presentó su libro La ruptura que viene, donde la tesis central es que mientras no exista una preconstrucción del Estado, el país no saldrá del régimen priista.

Y es que, para el coordinador del Frente Amplio Progresista, aunque se siga en el debate para saber si estamos en un Estado fallido, existen otros elementos como un “Estado arrasado por el narcotráfico, sin alguna solución en el aspecto económico”, por los que el pueblo debería forzar la salida del titular del Ejecutivo, Felipe Calderón.

En entrevista, Muñoz Ledo urgió a crear un sistema de destitución presidencial y de reglamentar la revocación del mandato, cuando el gobierno no pueda resolver los problemas graves del país. Corremos el riesgo, dijo, de que recuerden este periodo no como la era de la transición, sino como la del contubernio con las mafias del narco, la involución económica y la pérdida del sentido nacional de la política mexicana.

Recordó que fue con Andrés Manuel López Obrador, ex candidato presidencial en 2006, cuando se aplicó el procedimiento constitucional llamado desafuero sin haber una razón, “sino una saña”. Y ahora, cuando se habla de aplicarla a otros personajes, “parece que estoy en la Luna”.

“¿Por qué no hacerlo en este caso?”, se cuestiona. “Aquí hay todas las razones: un Estado casi fallido (estamos en el debate de qué elementos faltan), un gobierno incompetente, un presidente ilegítimo y un país en bancarrota económica, y los mexicanos siguen como si estuvieran en la playa”.

Criticó que el gobierno calderonista no entienda la responsabilidad que tiene en materia de derechos humanos y que los viole constantemente. Recordó que por esa razón, el año pasado corrieron al representante del Alto Comisionado de las Naciones Unidas, Américo Incalcaterra, “por haber planteado la pérdida del fuero militar en los casos de violación grave de derechos humanos”.

El año 2010 es el límite para que las cosas cambien, reitera, “se viene un tobogán (…) la sociedad mexicana tiene que tomar una decisión”.

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